Últimamente me estoy encontrando con gente «un poco rara», porque llaman la atención por una cosa o por otra. A algunos soy capaz de sacarles una foto, a otros no. Ya sea porque no lleve conmigo mi cámara, o porque me de vergüenza dispararla. Pero lo que si puedo es describir como era la persona, por qué me parecía rara, para que vosotros podáis juzgarlo.

Hoy quiero hablar del «ninja del tranvía». No quiero que os imaginéis a un Javi Guerrero dando saltos por dentro de un vagón, no.

Yo estaba sentado en los últimos asientos del tranvía, que dejan una muy buena vista de la calle por la que vas pasando, y puedes ir viendo a la gente, otros tranvías… etc. El caso es que en cierta parada, se sube un chico. Lleva dos envases de empanadas (o algo parecido) y se los va comiendo. Lleva cosas colgadas a la espalda, una bolsa, un saco de dormir, una esterilla de las inchables, y una katana. ¡O no! Ahora que lo veo mejor, no es una katana, bueno, parece una katana, pero en vez de la funda, lleva  las varillas de un paraguas… (lo he encontrado en «no puedo creer…«) Continue reading